En España, durante los meses de verano, algunas de las plagas más habituales incluyen:
Mosquitos: Los mosquitos son una de las plagas más comunes durante el verano en muchas partes de España. Su presencia puede resultar molesta e incómoda, y también pueden transmitir enfermedades como el virus del Nilo Occidental.
Hormigas: Las hormigas son otro problema frecuente en verano. Estos insectos buscan alimentos y agua, y pueden invadir las cocinas y áreas de almacenamiento en busca de recursos.
Cucarachas: Las cucarachas son una plaga persistente durante todo el año, pero su actividad suele aumentar en los meses más cálidos. Son insectos nocturnos y se esconden en lugares oscuros y húmedos. Pueden transmitir enfermedades y contaminar los alimentos.
Avispas y abejas: Durante el verano, las avispas y las abejas suelen estar más activas. Si bien las abejas son beneficiosas para el ecosistema, las avispas pueden volverse problemáticas y agresivas, especialmente cerca de las áreas de comida o bebida al aire libre.
Pulgas y garrapatas: Estos parásitos son más frecuentes durante el verano debido al aumento de actividades al aire libre y el contacto con animales domésticos o de granja. Pueden causar picazón intensa y transmitir enfermedades tanto a humanos como a mascotas.
Es importante tener en cuenta que la presencia de plagas puede variar según la región específica de España y las condiciones locales. En caso de enfrentarse a una plaga, es recomendable contactar con profesionales en control de plagas cómo lo somos en Arlo Gestión Ambiental.